La ansiedad es considerada como un trastorno mental que se caracteriza por la presencia de emociones inquietantes, como el miedo o la preocupación constante.
Estas sensaciones influyen en la vida cotidiana afectando a las actividades básicas. Estos problemas son muy comunes, y siempre encontraremos a alguien con dificultades para lidiar con la ansiedad. Entender a las personas con este síndrome nos puede brindar las respuestas para aprender vivir con el trastorno.
Ponerse en la piel del otro
Las personas que intentan lidiar con la ansiedad no han elegido sufrir de este trastorno, al contrario, ha sido el problema quien ha llegado a ellos. Esto da la sensación de estar atrapado en un laberinto donde, ocasionalmente, existen periodos de estabilidad que luego se ven empañados por recaídas. Las personas con ansiedad ven la tarea más sencilla como un gran problema, por eso no hay que brindarles la solución, sino ayudarlos para que ellos solos puedan solucionarlos.
Para alguien ansioso explicar sus sentimientos y emociones es una tarea bastante complicada. En ocasiones es difícil ver que son adversidades tangibles y de gran magnitud para causar ese estado, pero la solución no está en minimizar sus problemas, sino entenderlos y darles importancia. Para ellos sentir que sus problemas son reales y que no son producto de su imaginación es una forma de lidiar con la ansiedad.
La mente tiene un juego en las personas ansiosas. Cuando internamente comienzan a creer en problemas, estos se vuelven reales en su día a día. No porque no compartamos sus preocupaciones y emociones significan que estos dejan de ser verdaderos. Cuando en la mente se fija la incapacidad para solventar algo, es probable que realmente no se pueda arreglar. Este dilema se puede tornar en algo serio si no se presta la debida atención.
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