COMO NOS AFECTA PERDER UNA AMISTAD


 

 

Las amistades son relaciones más demandantes que las amorosas. Aunque las personas no quieran, la mayoría de las relaciones amorosas tienen fin, pero las amistosas generalmente buscan durar toda la vida. Sin embargo, es posible perder una amistad.

Amistades tóxicas

 

“Solemos proyectar nuestros propios sentimientos en nuestros amigos porque el otro es un reflejo de nosotros mismos. Como no le deseamos ningún mal, imaginamos que él o ella tampoco nos lo desea a nosotros", señala una psicoterapeuta experta en el tema. Generalmente cuando se tiene una relación de amistad, las expectativas sobre esa misma son muy altas. Es inevitable no poner expectativas en personas que quieres.

 

 

Cuando la relación inconscientemente está royendo tu vida con demasiados problemas es cuando te das cuenta que algo no está bien y que puedes perder una amistad. Es determinante aceptar la situación y proceder cuando sientas que ya no estás feliz y que te cansa la otra persona. Muchas veces una de las personas evoluciona y la otra se queda estancada, y esto generalmente termina en una ruptura, porque ya no hay gustos en común.

 

 

 

 

Tras perder una amistad, recuperarse es algo duro, justo como una ruptura amorosa. Hay dos caras de la moneda, como en cualquier relación, y cada uno tiene una forma distinta de superación, pero lo correcto es saber que se debe seguir adelante. No es recomendable quedarse encadenado a una amistad que no funcionó, porque hay muchísimas personas dispuestas a tratarte bien y hacer una diferencia en tu vida. Nadie reemplaza a nadie, pero otra persona puede hacer que te sientas mejor y sano.

 

 

Lo más recomendable es conocer cada aspecto de la amistad para evitar inconvenientes y, como en cualquier otra relación, la comunicación es fundamental. No todas las rupturas deben ser inmediatas o dolorosas.