Nada que queramos conseguir, ningún sueño que tengamos en mente se podrá cumplir, si antes no realizamos un plan ordenado y prioritario de nuestros objetivos.
Defina con claridad en su mente, en un papel, en una grabación o de la forma que Ud. desee sus objetivos principales y secundarios. Sea tener éxito en el trabajo, tener riqueza, logros profesionales, el amor de un hombre o una mujer, cualquier cosa se puede conseguir si nos entregamos al proceso del Enfoque Correcto, pero es básico que primero fijemos nuestros objetivos.
Nuestros objetivos pueden estar expresados en una grabación o una tarjeta escrita que debemos procurar escuchar o leer la mayor cantidad de veces durante el día.
Es muy bueno hacerlo principalmente antes de acostarse y al levantarse.
Las metas que tengamos pueden ser lógicas o hasta ilógicas lo que no es problema si en esto último usted tiene una fuerte convicción de concebirlas en su mente. Una vez que haya decidido cuáles son sus objetivos, ordénelas según importancia y prioridad.
Habrá un gran objetivo personal principal que nos puede permitir llegar al desarrollo de la mente, o un acceso pleno a sus poderes, también el objetivo se puede expresar como un objetivo que mediante el recorrido a su logro nos va a permitir conocer una vida feliz con salud plena y llena de éxitos que antes le podían parecer inimaginables.
Cada uno de los logros conducentes a nuestro gran objetivo personal principal son los objetivos específicos. Estos objetivos específicos son realizaciones que deben darse necesariamente para que el gran objetivo principal se dé. Son como los vagones que siguen al gran tren que puede ser tan extenso como Ud. lo imagine.
Dibuje bien en su mente como quiere que estos sean, confíe y crea que los va a conseguir, aunque al principio cueste. Dentro de ellos habrá otros pequeños o medianos objetivos necesarios para nuestra preparación hacia lo más grande. Escoja cuál es su objetivo personal principal.
MARDAM